Han pasado dos años desde el asesinato de DIANA CAROLINA, una mujer notable y valiente, defensora del territorio y de la vida, reconocida en el Municipio de San Cayetano, área metropolitana de Cúcuta, por su lucha contra la contaminación y la destrucción del medio ambiente. Fue asesinada el 11 de abril de 2023 y desde entonces no hay ni un solo resultado positivo en la respectiva investigación judicial. La impunidad es total y la indiferencia institucional es absoluta.
Hoy, la Familia de DIANA y la FUNDACIÓN PROGRESAR, en su condición procesal de representante de víctimas y defensora de derechos humanos, señalamos con total claridad la responsabilidad institucional en este caso. Denunciamos públicamente la falta de diligencia del Estado colombiano que ha fallado en su deber de esclarecer los hechos, castigar a los responsables y proteger a quienes alzan la voz en defensa de sus derechos.
El crimen contra DIANA CAROLINA RODRIGUEZ MADRIGAL no fue un hecho aislado ni producto del azar. Fue un acto calculado para silenciar su voz, una respuesta violenta al poder que representan las mujeres que defienden el territorio.
Lo que ha seguido es igual de grave que su asesinato: dos años de silencio, de negligencia, de complicidad. Dos años en los que la Fiscalía no ha entregado respuestas, y en los que el Gobierno Nacional ha optado por callar. No es solo omisión, es abandono y es encubrimiento. Es una señal clara de que este crimen busca quedar en la impunidad.
Por eso, exigimos:
- Que la Fiscalía General de la Nación rinda cuentas a la familia, a la comunidad y avance en la identificación y judicialización de los responsables.
- Que el Estado Colombiano reconozca públicamente su falla en garantizar la vida y seguridad de esta lideresa y de quienes hoy siguen siendo amenazadas por defender el medio ambiente.
- Que los mecanismos de protección sean fortalecidos en territorios como San Cayetano, donde las voces críticas siguen en riesgo.
- Que organismos internacionales de derechos humanos vigilen de cerca este caso y acompañen las exigencias de justicia y verdad de la familia de DIANA CAROLINA RODRIGUEZ MADRIGAL.
A la comunidad de San Cayetano, a las mujeres que resisten, a quienes no bajan la cabeza pese al miedo, les decimos: la memoria de DIANA CAROLINA RODRIGUEZ MADRIGAL está viva. No vamos a dejar que su lucha se entierre bajo la impunidad. No dejaremos de exigir justicia.
Porque defender los derechos humanos, el agua, los ríos y la tierra no puede costar la vida. Porque un Estado que no protege a sus liderazgos sociales, es un Estado que los condena.
San José de Cúcuta, abril 11 de 2025.